Seguro que en alguna ocasión de las que habrás usado el ordenador portátil ha llegado un momento en el que no podías usarlo porque se había congelado el portátil. Cuando esto sucede lo que se nos ocurre es reiniciar el equipo, pero existen otras soluciones:
Por desgracia, que se te haya congelado el portátil ocurre más de lo habitual y sobre todo en los portátiles ya que cuentan con menos RAM que los ordenadores de sobremesa. El bloqueo o congelación también viene dado por trabajar muchas horas de forma continuada, es lo que se conoce como sobrecalentamiento.
¿Cuándo decimos que se ha «congelado» el ordenador?
Normalmente los principales síntomas que nos encontramos cuando nuestro ordenador se congela son los siguientes:
- Windows no responde y nada, incluida la flecha del ratón, se mueve por la pantalla de nuestro portátil.
- Se aparece una pantalla con algún mensaje de error, que no podemos eliminar de ninguna de las maneras.
- Al abrir alguno de los programas de nuestro PC portátil ha bloqueado el ratón y nada responde.
Estas son las causas más habituales, aunque pueden existir más. Es un problema habitual así que no debe cundir el pánico y que ha llegado la hora de reemplazar nuestro ordenador por otro.
Como actuar cuando se ha congelado el portátil o el PC:
Administrador de tareas
El mejor aliado a la hora de combatir este problema es el administrador de tareas. En muchas ocasiones funciona, pero eso no garantiza que vaya a funcionar al 100% siempre.
Para acceder a él, debes presionar a la vez las teclas “Ctrl + Alt + Supr” de tu ordenador. Automáticamente, si el administrador ha funcionado, accederás a una ventana en la que te aparecerán las siguientes opciones: bloquear, cambiar de usuario, cerrar sesión, cambiar una contraseña y administrador de tareas.
Accede directamente al administrador de tareas y una vez allí, trata de cerrar todas las tareas abiertas en el equipo. Después, sal del administrador y comprueba si tu ordenador vuelve a funcionar. En caso de que continúe bloqueado, vuelve a presionar las teclas “Ctrl + Alt + Supr” y esta vez pincha en cerrar sesión para apagar tu ordenador y volver a empezar desde cero.
Reinicio rápido
En caso de que no funcionen los botones de ejecución del administrador de tareas deberás optar por el reinicio rápido. No es la más recomendable, pero si la más efectiva si nos encontramos en un modo de desesperación total. Para ello, tan solo tienes que apretar y mantener pulsada durante unos segundos la tecla de encendido de tu portátil. Si todo va bien debería reiniciarse automáticamente, y al volver a encenderse, debería funcionar correctamente. Pero no siempre funciona, ya que hay veces en las que la tecla de inicio ni siquiera responde.
Retira la batería y desconéctalo de la corriente
Aquí entramos en lo que sería la opción más drástica. De esta manera el ordenador se apagaría con toda seguridad, aunque esto debería ser el último recurso. En los portátiles más recientes, la batería se encuentra dentro del equipo y su extracción es más complicado. En tal caso lo recomendable es dejar que se agote. Al volver a encenderlo, casi con total seguridad te encontrarás con alguna ventana que te advierta de que la última vez el equipo no se apagó correctamente. Pulsa aceptar para que inicie el modo de recuperación
Algunas formas de prevenir la congelación son:
– Analiza el pc en busca de virus.
– Saca rendimiento de tu RAM.
– Actualizar los componentes.
Si después de estas soluciones los problemas de tu equipo siguen persistiendo, en Microzone nos encargamos de diagnosticar el problema e intervenir en una futura reparación. Nos encontramos en c/Alcalá, 79. Alcalá de Guadaira.
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